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La Corroncho, la cocodrilo del biotopo Dos Lagunas que fue devorada por un jaguar

Jaguar devora a mítico reptil que reinaba en zona selvática de Petén, hasta donde turistas llegaban para fotografiarse con este.

La Corroncho medía unos 2.70 metros de largo y tenía entre 45 y 50 años de edad. (Foto Prensa Libre: Cortesía Francisco Asturias)

Con más de 2.70 metros de largo, la Corroncho, un cocodrilo hembra, reinaba en el Biotopo Dos Lagunas, Petén, donde demostraba sus habilidades para cazar presas grandes como venados, pero también su docilidad para acercase a los seres humanos que la alimentaban y se fotografiaban con ella.

Durante años, la Corroncho fue un ícono en esa región selvática de Petén, pues muchos turistas viajaban a ese lugar para conocerla y tener la oportunidad de alimentarla con pollo; sin embargo, esta desapareció hace cinco días y este 11 de septiembre conservacionistas localizaron sus retos, por lo que se presume que fue devorada por un jaguar.

Francisco Asturias, director de la Fundación para la Conservación y el Ecodesarrollo (Fundaeco) en Petén, comentó que la muerte de la Corroncho representa una pérdida irreparable, pues durante muchos años ellos la alimentaron con pollo, lo que hizo que perdiera el temor por lo humanos y se convirtiera en un atractivo turístico.

Refirió que ese animal nunca perdió sus instintos salvajes y que en varias oportunidades lo vieron cazar en aguas de la laguna, donde se desplazaba a grandes velocidades de manera sigilosa para sorprender a sus presas.

Cadena alimenticia

Los expertos lamentan el acontecimiento, pero están conscientes de que es parte de la cadena alimenticia y que en esta oportunidad le tocó perder a la Corronchó, a la que se le calculaban entre 45 y 50 años de edad.

Asturias cree que el jaguar que atacó a la cocodrilo llegó a beber agua a la orilla de la laguna, una oportunidad que la Corroncho no podía dejar pasar, por lo que se abalanzó sobre su presa, pero el felino fue más hábil y fuerte y le ganó la batalla.

Añadió que el panorama será diferente en el lugar, pues ninguno de los otros cocodrilos que viven en la zona se acerca a los seres humanos como lo hacía la Corroncho.

VIA PRENSA LIBRE