Estados Unidos contempla remitir a territorio guatemalteco a mexicanos solicitantes de asilo. El ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, indicó que el tema está en conversación y corresponderá al gobierno de Alejandro Giammattei concluir las discusiones.
El ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, se refirió a la posible llegada de migrantes mexicanos al territorio nacional como parte del acuerdo migratorio firmado por Estados Unidos.
Recientemente el Departamento de Seguridad Interior (DHS) de EE. UU. informó que se estaría enviando a la nación centroamericana a algunos ciudadanos del vecino país que están buscando protección humanitaria en aquel país.
“Pueden ahora ser elegibles para ser transferidos a Guatemala y darles la oportunidad de buscar protección ahí”, dijo un portavoz del departamento en un comunicado.
La cancillería de México manifestó en un comunicado su “desacuerdo” ante esta medida por las afectaciones que podría provocar a los mexicanos en esa situación, que estima en unos 900 a partir de febrero.
Tema en discusión
Degenhart aseguró que el tema todavía está en negociación y le corresponderá al gobierno entrante, a cargo de Alejandro Giammattei, definir la ruta a seguir y decidir si será o no implementado.
De acuerdo con el funcionario, el acuerdo de cooperación firmado en julio pasado entre Guatemala y EE. UU. está enfocado únicamente en la atención de hondureños y salvadoreños.
Sin embargo, se han sostenido conversaciones con EE. UU. para ampliarlo y que también pueda recibirse a los mexicanos, pero es algo a lo que le hace falta la conclusión jurídica.
“Ese será nuevamente un proceso administrativo que le tocará a la administración entrante dilucidar y eventualmente implementar si fuera la decisión”, dijo.
Según el ministro, no se busca dejar comprometido al próximo gobierno, sino “darle toda la libertad para que decida si quiere o no quiere implementar este addendum” a lo que ya se hace con el convenio vigente.
De ser así, se espera tener resultados como los de hasta ahora, indicó, es decir, que los migrantes opten por el retorno voluntario a sus países, tal como se ha dado en la mayoría de los casos de los centroamericanos que hasta ahora han sido remitidos a Guatemala.
Solo dos de los extranjeros han solicitado medidas de protección, por lo que se reconfirma que en su mayoría se trata de migrantes económicos y no de quienes tengan algún tipo de riesgo para dar continuidad a sus vidas en sus naciones de origen, añadió.
Apoyo de organizaciones internacionales
De noviembre a la fecha son por lo menos 80 hondureños y salvadoreños los que han sido trasladados desde EE. UU. hacia Guatemala para esperar en este territorio la respuesta a peticiones de asilo planteadas en Norteamérica.
Los migrantes han recibido atención de organizaciones de derechos humanos y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en temas de salud, alimentación, refugio, asistencia legal y para volver a sus países.
Con relación a las razones por las cuales no es el Gobierno de Guatemala el que se hace cargo de estas personas, tomando en cuenta que fue el que suscribió el convenio de cooperación con EE. UU., Degenhart explicó lo siguiente:
“Como Ministerio de Gobernación o como Estado no podemos hacer ningún tipo de erogación presupuestaria para darles ese tipo de servicios colaterales o servicios de atención”.
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