El expresidente de la república Elías Antonio Saca debe cumplir dos años de cárcel luego de que confesó ante una jueza que sobornó con $10,000 a una empleada de la Cámara Primera de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia (CSJ). El exmandatario logró, por segunda vez , reducir una condena con su confesión. El año pasado aceptó corrupción en su Gobierno.
La condena fue impuesta ayer por la jueza Novena de Instrucción, Nora Montoya, durante un juicio abreviado en el caso llamado Transes.
Antes de enfrentar la audiencia, Saca ya había pactado con la Fiscalía General de la República (FGR) que confesaría que en 2016 sobornó a Ángela Iracema Avelar, empleada de la CSJ, para obtener información del juicio civil que llevaba esa Cámara en su contra.
El expresidente aceptó que contactó a Avelar por medio del abogado Víctor Manuel Melgar, conocido como “Pitinga”. Incluso dijo que los $10,000 se los entregó a Melgar, quien el mes anterior fue enviado por el mismo juzgado instructor a un juicio por este proceso. Mientras que la exempleada de la CSJ cumple desde diciembre pasado con dos años de trabajo utilidad pública tras confesar ante la misma jueza que aceptó el soborno, pero sin recibir el dinero.
La confesión permitió que Antonio Saca reduzca hasta ocho años de cárcel. El Código Penal, en su artículo 335, castiga el cohecho activo (soborno) con condenas desde seis a 10 años de prisión. La FGR aclaró que el acuerdo de reducción de condena fue aprobado por el ex fiscal general, Douglas Meléndez.
En septiembre de 2018, el expresidente usó la misma estrategia: aceptó ante el Tribunal Segundo de Sentencia que lideró a una red que se apropió de $301 millones de fondos públicos durante su Gobierno y fue condenado a una pena menor que también pactó con la FGR: 10 años de cárcel que cumple.
“Tal y como quedó establecido, él ha confesado los delitos, y quedó en acta que hizo la entrega de los $10,000 a fin de que se le entregara la información de la Cámara Primera de lo Civil”, dijo ayer una fiscal de la Unidad Anticorrupción.
Cárcel en suspenso
El fallo de ayer no dejó claro si los dos años de prisión de Elías Antonio Saca, presidente salvadoreño bajo la bandera de ARENA (2004-2009), deben sumarse a los 10 años que ya cumple desde septiembre tras confesar que cometió los delitos de peculado y lavado de dinero en durante su gestión.
Mario Machado, defensor del exmandatario, insistió ayer que Antonio Saca ya cumplió la pena de dos años de cárcel porque está en prisión provisional por este proceso desde el 19 de agosto de 2017, por orden del Juzgado Noveno de Paz de San Salvador.
La jueza Nora Montoya, en su fallo de ayer, no dejó firme si Saca debe cumplir 12 años de cárcel o solo 10. La juzgadora ordenó que sea un Juzgado de Vigilancia Penitenciaria y Ejecución de la Pena el que decida si ambas condenas se suman, según confirmaron las fiscales del caso y el abogado Machado.
Pero el expresidente Antonio Saca no fue el único que enfrentó ayer juicio por el caso Transes. Rafael Edgardo Calderón, exjuez de Paz de San Francisco Menéndez (Ahuachapán), también aceptó ante la jueza que asesoró ilegalmente a involucrados en procesos que tenía a su cargo.
El exjuzgador aceptó el delito porque tiene un pacto con la FGR para reducir su condena: pagará solo tres años de utilidad pública. Hasta el cierre de la nota, el juicio contra el exjuez no había finalizado.
*Vía La Prensa Gráfica
